1. Un semestre marcado por circunstancias especiales
- Es muy claro que este semestre estuvo para Uds atravesado por varias dificultades. Temas de salud, cansancios, retiros y tensiones que necesariamente afectaron la atmósfera del grupo.
- Así que siento que no fue un semestre “típico”, semejante a los anteriores, pues, en mis palabras, fue un semestre más “emocional”.
- Y todos esos movimientos afectaron al grupo entero, porque cuando un grupo es tan unido como este y está en una etapa tan avanzada en su formación, lo de le sucede a uno necesariamente repercute en todos los demás. Y no solo afecta a los compañeros, sino también a nosotros.
- Concretamente, la salida de Dadaly y de María Isabel, y el vacío que ellas dejaron, fue un duro golpe para todos.
2. Sobre el contenido alquímico del semestre
- Pero yo no he podido dejar de hacer un paralelo entre el material que leímos durante el módulo y esto que vivimos durante el semestre.
- No sé si Uds lo vean un poco forzado, pero yo lo he sentido así.
- Edinger describe la nigredo como un período de oscuridad necesaria, donde todo se desajusta para que algo más profundo pueda reorganizarse.
- Y si miramos lo que vivimos este semestre (enfermedades, renuncias, dudas, agotamiento, preocupaciones), vemos que atravesamos justamente eso: una etapa de nigredo en el proceso formativo. Fue como la propia alquimia actuando en el grupo.
- Como si lo alquímico no se hubiera quedado en la teoría, sino que la nigredo se hubiera hecho presente en la cotidianidad del grupo.
- Pero que no es algo negativo, pues recordemos que después de la nigredo viene la albedo, con toda su posterior claridad.
- Por eso pienso que más que un semestre teórico, este fue un semestre alquímico.
3. Sobre mi seminario de la autobiografía de Jung
- Ahora, para mí este semestre tuvo un ritmo particular porque solo estuve con ustedes en dos seminarios y creo que eso me dio una perspectiva diferente.
- Fue una perspectiva un poco más desde afuera, pero no por eso menos clara. No sé, a veces, cuando uno acompaña un proceso con algo de distancia, como que logra percibir los movimientos de fondo con más claridad que cuando está adentro, “en medio del agite”.
- Quizás eso es lo que me permite hacer estos paralelos entre lo que estudiaron y lo que vivieron.
- Fíjense que yo trabajé con ustedes la autobiografía de Jung, en la que vimos que fue precisamente su crisis, luego de la ruptura con Freud, la que le permitió comenzar a escribir sus Libros Negros y su Libro Rojo, que es lo más revolucionario de su pensamiento.
- Y no puedo dejar de pensar que este semestre tan agitado haya sido el descenso necesario para que algo nuevo pueda nacer.
- Jung decía que la psique produce imagen cuando la vida se desordena. Y creo que, sin que nos lo hubieramos propuesto, este semestre nos puso en contacto con ese desorden fértil.
4. El Diario Intensivo como verdadero cierre interior
- Y también lo enlazo con la actividad del Diario Intensivo, que vino a ser el lugar y el espacio para escribir también nosotros nuestros propios Libros Negros.
- Yo creo que el Diario Intensivo no fue una elección casual, sino que fue la etapa simbólica de cierre necesaria para de un semestre que venía con ese tono alquímico.
- Por eso, para mí, el cierre con el Diario fue tan coherente con todo lo que se venía moviendo.
- Y es que cuando un grupo vive un periodo así de agitado, más que evaluaciones académicas, lo que realmente ayuda es una introspección profunda.
- Y esa escritura silenciosa del Diario permite asimilar lo vivido sin necesidad de compartirlo, de exponerlo, explicarlo, ni de ser evaluado por nadie.
- No, cada uno trabajó desde su propio ritmo, con sus propias imágenes y con su propio tejido vital.
- Y creo que la invitación a Dadaly y a María Isabel fue muy linda. Para mí, tuvo el sentido de mantener vivo ese puente interior de la «manada» entre quienes siguen, entre quienes interrumpen y entre quienes nos abandonan.
- Por todo lo que pasó en el semestre, yo sentí que esta+ fue una etapa en la que cada uno tuvo que preguntarse, muy íntimamente, si este camino realmente era el suyo.
- Y si lo era, cómo mantenerse en él, no solo en los momentos de entusiasmo, sino también cuando la vida personal se nos desordena. O cuando el semestre se desordena.
- Podríamos decir que fue un semestre “difícil”, pero a mí me parece más honesto decir que fue un semestre profundamente humano.
5. Mirada hacia adelante
- Y mirando hacia adelante y lo que sigue, Ustedes están entrando ya al tramo final de esta formación.
- El próximo será ya el último semestre académico, antes de entrar en el año del trabajo final, de las supervisiones y de las sesiones de análisis que falten.
- Ya cada vez está más cercano el momento de la titulación. Por eso es natural que nosotros empecemos a pensar en Uds ya no como candidatos, o supervisados, sino como próximos colegas.
- Colegas que incluso podrán estar a cargo de los futuros procesos de formación. O a cargo de llevar lo junguiano a otros espacios y otras generaciones.
7. Palabras finales
- Yo creo que un grupo no se forma solo en la armonía, sino también en la capacidad de atravesar juntos lo difícil y lo que duele.
- Vuelvo al tema de la nigredo y es que la vulnerabilidad que vimos este semestre, sabemos que no es debilidad, sino que puede verse como la forma junguiana en que la psique desciende y se abre para poder reorganizarse.
- Así que como dije antes, los invito a mirar este semestre como una prima materia. Es decir, como algo que se disuelve, que se calienta y que se transforma para crear algo nuevo.
- Y cuando hoy vayamos al almuerzo —los que quieran y puedan— ojalá lo vivamos como un pequeño ritual de cierre temporal. Un cierre previo a abrir el semestre que sigue, que será casi el definitivo.
- Los felicito por soportar este camino, que no es solo académico, sino que es, en el sentido más profundo, un camino del alma.

